¡Qué cosas, hermano,
que tiene la vida!
Yo no la querÃa
cuando la encontré
hasta que una noche
me dijo, resuelta:
Ya estoy muy cansada
de todo... Y se fue.
¡Qué cosas, hermano,
que tiene la vida!
Desde ese momento
la empecé a querer.
¡Cuántos sacrificios
hice pa olvidarla!
¡En cuántos fandangos
mis noches perdÃ!
¡Quien hubiera dicho
que por ese mono
diera tantos tumbos
como los que di!
He tirao la vida
por los cafetines
pa mostrarle a todos
que ya la olvidé,
pero todo es grupo
y al quedarme a solas
he llorao, hermano,
como una mujer.
Dos años enteros
la tuve a mi lado
y nunca, ni en sueños,
quererla pensé.
¡Quien iba a decirme
que loco yo un dÃa
la vida darÃa
por verla otra vez!...
¡Qué cosas, hermano,
que tiene la vida...
¡Si somos machiettas
entrando a querer!